Hoy, nuestros chicos y chicas del comedor, van a poder degustar unos platos típicos de Asturias:

Primer plato: Fabada Asturiana
Segundo plato: Merluza a la asturiana con verduras
Postre: fruta y leche
El origen de la Fabada
La fabada es un plato típico de la cocina de Asturias. Está elaborada con fabas (en asturiano, fabes, palabra originaria del bable, lengua de Asturias) y compango (chorizo, morcilla y tocino).
No sabemos a ciencia cierta los orígenes de este plato. No se han encontrado referencias escritas sobre ello hasta el siglo XIX, en el que en un diario de Gijón llamado “El comercio”, se menciona la fabada como un plato popular asturiano, aunque el consumo de “fabes” se remonta hasta el siglo XVI. Lo que sí que sabemos es que es una de las recetas más populares y típicas de la cocina española.
Los ingredientes de la Fabada Asturiana
Los ingredientes de la receta nos dicen que este plato tiene orígenes humildes, pues el compango se obtenía de la matanza del cerdo y las “fabes” se cultivaban por el territorio y, por supuesto, se consumían.
Podemos deciros que la variedad de alubia que se emplea para realizar este plato es la que se denomina “de la granja” y es una variedad de gran tamaño, de color blanco, con una forma recta, larga y aplanada. Además, es suave y mantecosa.
Con respecto al compango, se trata de embutidos en salazón y poseen un aroma ligeramente ahumado. Normalmente se utiliza el tocino, el chorizo y la morcilla, pero también se le puede añadir lacón, costillas, oreja o rabo.
Como curiosidad, os contamos que se suele confundir la fabada con el pote asturiano, pero no es igual. Al pote asturiano se le añade patatas y berzas, así como otras verduras típicas de la región.
¿Queréis conocer otras variantes de la fabada?
La emigración asturiana, especialmente en América, dieron a conocer este plato fuera de nuestras fronteras, con lo que podemos encontrarnos variantes de este plato en diversos países, como en Colombia, que disfrutan de “la bandeja paisa” o en México, donde existe un platillo llamado “frijoles charros”, muy similares a la fabada asturiana. También nos encontramos con la “feiojada” de Brasil o los “porotos” de Chile.
¿Y si os decimos que el “cassoulet”, un plato típico francés, es muy, muy similar a la fabada?
Muchos expertos dudan si fue primero el plato del país vecino o la fabada y debido a la peregrinación del camino de Santiago uno se vio influenciado por el otro.
Lo que sí tenemos claro es que nuestros chicos y chicas del comedor van a poder disfrutar hoy de este plato y les deseamos…
¡¡¡¡¡Buen provecho!!!!